Un partido para olvidar

Hoy, hacía 15 años que el Taugres Vitoria de aquel entonces, lograba alzar la copa europea ante el PAOK griego. Y la verdad es que no ha sido un aniversario muy agradable en cuanto a lo deportivo se refiere.

Sabíamos, que era una cancha complicada. Sabíamos, que los grandes habían caído allí. Pero lo que no sabíamos, es que saldríamos derrotados de Fuenlabrada por una diferencia abismal. No solo en cuanto a puntos, sino que en el juego, el equipo madrileño también nos ha pegado un repaso.

El encuentro comenzó muy bien para el Baskonia, moviendo el balón correctamente y acertados en el tiro. 10 arriba al final del primer cuarto. En el segundo, el Fuenlabrada nos recortó distancias y se llegaba así uno arriba al descanso, 37-38.
Pero el comienzo del tercer cuarto fue el inicio de la debacle. Comenzaron fuertes en muy defensa y acertados en ataque, mientras que nosotros no parábamos de perder balones. De dicha fórmula, sacamos el parcial de 34-7, que encajamos en tan solo 10 minutos.
A raíz de eso, el conjunto baskonista no pudo hacer nada en el último cuarto, mas que ver cómo los fuenlabreños se seguían haciendo fuertes en casa y tumbaban a otro de los grandes de la liga.

Los 2 de valoración de San Emeterio, hablan por sí solos, aunque lo verdaderamente duro de asimilar y que no aparece en las estadísticas es la escasa fluidez de juego.

Pero por si eso fuera poco, el Baskonia no logra una victoria fuera de casa desde el 9 de enero tras la ajustada victoria en San Sebastián por 80-83.

¿Será qué el equipo tiene la vista puesta en los cuartos de Euroliga? Quizás, no lo sé, pero en cualquier caso no es motivo para caer en Fuenlabrada de la manera que ha caído.
Ahora solo toca asimilarlo, pensar en los próximos encuentros, y, sin duda, animar a los jugadores.